Arrepentida, Amneris suplica a los sacerdotes el perdón para Radamés si es que delata el escondite de su gran amor, quien ha logrado escapar junto a su padre, pero valiente él se niega y es condenado a ser enterrado vivo.
Arrepentida, Amneris suplica a los sacerdotes el perdón para Radamés si es que delata el escondite de su gran amor, quien ha logrado escapar junto a su padre, pero valiente él se niega y es condenado a ser enterrado vivo.Foto: EL SIGLO DE TORREÓN 23 de septiembre de 2006
publicada el 25 de septiembre de 2006